La guerra civil que vivió El Salvador en la década de los 80 no solo dejó muertos y destrucción el país, también hizo que muchos niños salvadoreños fueran entregados en adopción a familias extranjeras para salvar sus vidas. Ahora, una campaña de reunificación les ha dado la oportunidad de que estos se reencuentren con sus familias biológicas.
La Asociación Prebúsqueda que se encarga de reunir a los jóvenes que desaparecieron por razones forzadas durante el conflicto armado que vivió el país centroamericano, tiene 934 denuncias de padres que buscan a sus hijos fuera de las fronteras salvadoreñas.
Desde hace varios meses, la Asociación Prebúsqueda que se encarga de reunir a jóvenes salvadoreños que fueron obligados por la guerra a alejarse de sus familias está trabajando en una campaña para encontrar a los hijos desaparecidos por la guerra.
“La idea es invitar a los jóvenes que viven en el extranjero y en El Salvador, que tienen dudas sobres sus orígenes o su identidad a que se acerquen, ya que en los últimos meses muchos jóvenes nos escriben en las redes sociales porque quieren reunirse con sus verdaderos padres”, explica Felix Meléndez, vocero de Prebúsqueda.
La idea de lanzar una campaña para encontrar a los salvadoreños que salieron del país de forma forzada durante la guerra surgió también por la creciente demanda de denuncias para búsqueda y de mensajes de muchas personas que quieren reencontrarse con sus familias.
“Quiero saber quién soy, de dónde vengo y quiénes son mi padres…” a menudo estas son las razones que mueven a muchos salvadoreños que buscan reencontrarse con sus orígenes y que contactan a la asociación.
Patrick, es uno de ellos. Él espero más de 30 años para reencontrarse con su país, con su familia… con sus padres, llegó desde Francia en septiembre pasado para conocer a su madre biológica.
Según dijo a su llegada al país, siempre supo que no pertenecía a aquel país que lo vio crecer y la espinita que tenía en su corazón sobre sus orígenes lo motivó a hacerse una prueba de ADN y luego ponerse en contacto con Prebúsqueda.
Su madre, María Corina, esperó tanto tiempo este momento después de haber tenido en sus brazos solo seis horas a su hijo recién nacido. Entre llantos y abrazos María solo puede pedirle perdón a su hijo, mientras que Patrick responde “no hay nada que perdonar”.
María explica que debido a los enfrentamientos armados y a las persecuciones de campesinos durante la guerra tuvo que dar a luz a su hijo en un cueva en Suchitoto, un municipio ubicado al norte de la capital salvadoreña. La mujer le dice a su hijo que él le fue arrebatado y que nunca quiso apartarse de él.
Patrick es uno de los 244 salvadoreños que han podido reencontrarse con sus familias biológicas en El Salvador, él es parte de los 38 jóvenes que han sido encontrados en Europa. Otros 29 residen en Estados Unidos y el resto 169 fueron encontrados en Guatemala, Honduras y Belice.
Pero no todos quieren reencontrarse con sus padres, según los datos de la asociación, 93 casos de jóvenes que han sido localizados no quieren saber nada de sus familias en El Salvador y hay otra parte de las personas localizadas que quieren reencontrarse con sus raíces en el país pero no tienen recursos para hacerlo.
De todos los casos encontrados, 55 niños no pueden reunirse con sus padres, porque murieron durante el conflicto armado. Sus cuerpos fueron encontrados en fosas comunes y en sitios donde ocurrieron algunas masacres ordenas por el ejército salvadoreño.
Con la creación de Prebúsqueda en 1994, muchos padres y familias se acercaron para pedir ayuda para encontrar a sus hijos. Según los voceros de la organización cada año se reciben más denuncias.
Luego de recibir una denuncia se inicia un proceso de investigación y cuando se confirma que han localizado a un joven, se realizan las pruebas de ADN. Después, los padres y los jóvenes reciben atención psicológica y son preparados para el momento del reencuentro.
Prebúsqueda espera lanzar completamente la campaña dirigida especialmente a los jóvenes que viven fuera de El Salvador y que saben o tienen dudas sobre su identidad o sus orígenes, a finales de noviembre de este año.
Aunque hay planes para lograr reunificar y encontrar a los hijos de los salvadoreños perdidos en la guerra, no hay un registro nacional que permite tener un dato certero de cuántos niños fueron arrebatados de los brazos de sus padres durante el conflicto armado.
Carmen Rodriguez es
* En la foto , Patrick, uno de los casos de reunificación familiar.