Fue un 24 de febrero del 2013 cuando hombres y mujeres de los municipios de Tepalcatepec, La Ruana y Buenavista Tomatlán en el estado de Michoacán, decidieron tomar las armas y declarar la guerra al grupo criminal de los Caballeros Templarios, quienes habían creado una estructura económica y política que se sostenía del terror, violaciones de mujeres, el secuestro y la apropiación de tierras productivas.
Los grupos de autodefensa fueron creados principalmente por la iniciativa de la red de ganaderos y productores de la región, quienes surgieron por la incapacidad del gobierno mexicano. Aún con la ayuda en equipo y servicios de más de mil millones de dólares ya entregada por el gobierno de los Estados Unidos de América en el marco de la Iniciativa Mérida para contrarrestar el narcotráfico, no pudo detener la ola de violencia que llevaba cobrando la vida de más de 80 mil víctimas en un lapso de dos sexenios en México.
En ese sentido, el Obispo Raúl Vera en enero se refirió a la estrategia de la guerra contra el crimen organizado como “una simulación”, que ha reflejado la complicidad y encubrimiento por parte de las autoridades hacia los diferentes carteles. Dada esta situación, el pueblo michoacano decidió tomar las armas y decir ¡basta! al cobro de cuotas y extorsiones del crimen organizado hacia la población en general.
“Sabemos que el principal enemigo que teníamos cuando empezamos nuestra lucha era el mismo gobierno del estado”, sostuvo en entrevista con el Programa de las Américas José Manuel Mireles, médico del pueblo y habitante de Tepalcatepec que asumió el cargo de vocero de las autodefensas al inicio del levantamiento. Mireles sufrió un accidente en enero de este año, cuando la avioneta en la que viajaba hizo un aterrizaje forzoso, aunque los rumores en el pueblo coinciden que fue un atentado.
A su regreso se jacta de que las autodefensas han avanzado a tal grado de liberar a más de 30 municipios de los Caballeros Templarios y que continuarán hasta limpiar el estado de Michoacán, así mismo afirmó que la mejor arma con la que cuenta este movimiento es el pueblo. “Es un año en que hemos aprendido bastante, lo mas importante, que las únicas armas que hicieron posible este levantamiento de autodefensas y comunitarios, no fueron las que aportó ningún cartel, fue el pueblo de Tepalcatepec”.
La Ruana y Tepalcatepec parecen dos pueblos pintorescos, es increíble imaginarse que en estas tierras la gente vivió tantas atrocidades. El día 24, muchos se preparan para el festejo del primer año del levantamiento armado contra los Caballeros Templarios. Mariachis, barbacoa y cervezas están listos para dar inicio a la gran fiesta. Un desfile con cientos de personas que portan camisetas con la leyenda “Autodefensa, Por un Tepalcatepec Libre” dan inicio a las actividades.
“Hace un año Tepalcatepec era un infierno, eraun pueblo fantasma, no se podía caminar,” afirma Mireles. “Este año representa un gran logro porque nos habían dado 24 horas de vida como movimiento y aquí estamos.” El doctor Mireles regresó dos semanas antes de terminar su periodo de recuperación para poder estar presente este 24 de febrero en su comunidad y festejar junto a su pueblo.
Durante este año, una de las primeras estrategias que utilizó el Estado para tomar el control de la situación, fue el desarme de los grupos de autodefensa, lo cual provocó la muerte de un civil y varios heridos el día 14 de enero, una situación de tensión donde las autodefensas estaban a punto de sostener un enfrentamiento con el ejército. La estrategia dio un giro y el 27 de enero, cuando el gobierno pactó con algunos representantes el registro de las armas y a un cierto número de elementos que tenían que pasar por exámenes de confianza y ciertos parámetros establecidos por la Secretaría de Defensa Nacional (Sedena), lo cual dejaba fuera a muchos miembros de los comunitarios. No obstante, hubo quienes no estuvieron de acuerdo, como Luis Antonio Torres Gonzales – “El Americano” o “Simón” como lo conocen en el municipio de Buenavista.
“El gobierno está haciendo un acuerdo donde quiere que nos registremos como policías rurales, pero nadie va a estar al mando del gobierno, nosotros no vamos a esperar a que nos sigan matando gente,” afirmó en entrevista “El Americano”.
La estrategia del gobierno también viene acompañada de la presencia del ejército y la Policía Federal y estableciendo negociaciones por separado con los diferentes líderes de las autodefensas. Ha anunciado un paquete de 45 mil millones de pesos para proyectos de desarrollo en Michoacán.
Hipólito Mora, otro líder de los grupos de autodefensa, considera que se debe tomar en cuenta lo que está ofreciendo el gobierno “Lo que estamos tratando de hacer nosotros es aprovechar los apoyos que está ofreciendo el gobierno para reactivar la economía,” dice Mora. “El sueño que tenemos ahora es generar fuentes de empleo.”
Mora considera que es necesario el trabajo conjunto con el gobierno, pues en cada pueblo se conoce a la gente que ha sido parte de la delincuencia organizada y por tanto, los pueden señalar. Mora también afirma que no hay divisiones, pero sí existen diferencias y lo que él ve como una prioridad es que se dé una limpia en algunos grupos de autodefensa, donde tenga que participar el gobierno y los ciudadanos, para que le ayuden a hacer la limpieza de posibles infiltraciones.
¿Si en algún momento les ofrecen un puesto en el gobierno lo aceptarían?, se les preguntó a Mora y a Mireles. “Lo aceptaría solamente si fuera para el bien de los ciudadanos, pero para beneficio mío ¡no!” afirmó Mora.
La respuesta de Mireles fue diferente “Me enfoco exclusivamente al movimiento social. Yo tengo miedo de que en el momento en que se politice, el movimiento se acabe, porque los partidos políticos dividen a los pueblos”. Durante el accidente que sufrió Mireles, Estanislao Beltrán asumió su cargo de vocero pero a su regreso Mireles quedó de nuevo en la vocería oficial del consejo de las autodefensas. Asimismo, los miembros del consejo pactaron continuar liberando otros municipios manteniéndose en unidad.
Mireles declara que su movimiento se inspiró en los indígenas del pueblo autónomo de Cherán, Michoacán, quienes expulsaron a los talamontes y a los partidos políticos, organizando rondas comunitarias para defender sus territorios y evitar la presencia del crimen organizado. Un movimiento que fundamentó su autonomía en los instrumentos del Convenio 169 de la OIT y la Declaración de Naciones Unidas sobre Derechos de los Pueblos Indígenas.
Asegura que este derecho sobre la libre determinación de los pueblo indígenas no les aplica, por no ser indígenas, es por eso que decidieron cambiarse el nombre de comunitarios a grupos de autodefensa, pero aunque este convenio de la OIT no los respalda, Cheràn sigue siendo un ejemplo para ellos. Al mismo tiempo afirma que su movimiento es legítimo, porque se fundamenta en los artículos 10 y 39 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, los cuales dicen “Los habitantes de los Estados Unidos Mexicanos tienen derecho a poseer armas en su domicilio, para su seguridad y legítima defensa” y el Art. 39 que dice “La soberanía nacional reside esencial y originariamente en el pueblo … El pueblo tiene en todo tiempo el inalienable derecho de alterar o modificar la forma de su gobierno.”
“Hicimos el pacto que cuando venga el periodo de elecciones no nos van a dividir, yo quisiera que se unificara todo en un individuo o en diez que son los que van administrar al pueblo,” sostiene Mireles al hacer referencia del consejo comunitario de Cheràn, mientras concluye que seguirán avanzando.
Dos días después de los festejos del primer aniversario, los grupos de autodefensa avanzaron por los cuatro puntos cardinales de Michoacán, tomando los municipios de Santa Clara del Cobre, Opopeo y Zirahuén. El objetivo de los próximos días era avanzar hacia Morelia -capital de Michoacán-, pero el 26 de febrero el comisionado para la Seguridad y el Desarrollo Integral de Michoacán, Alfredo Castillo Cervantes, dijo que la Policía Federal ya había instalado tres puntos de vigilancia para impedir un movimiento autónomo de los grupos de autodefensa.
Por otra parte, en diversos municipios liberados como Buenavista, ya se empieza a dar un proceso de reorganización del tejido social. Algunas personas, como los miembros del consejo ciudadano, quienes se han reunido en varias ocasiones para discutir lo que sigue, han tomado la iniciativa de crear representantes de colonias y de barrios para hacer llegar las peticiones del pueblo hacia el gobierno o para consultar que rumbo tomarán.
Hay gente preocupada por sus hijos que han crecido en un contexto de guerra. Estos han aprendido sobre los diferentes calibres de las armas, han escuchado sobre asesinatos y otras atrocidades, muestran preocupación por los efectos de la guerra, como los que han perdido hijos, hermanos, padres o la gente que aún sigue recluida en penales de máxima seguridad.
No obstante es un aniversario que lo han festejado en grande, porque ya respiran una mayor tranquilidad. La señora Tania termina diciendo, “En general las autodefensas han hecho un buen trabajo, estamos más tranquilos. El rumbo que deberían de tomar las autodefensas es ver más lo social y obligar al gobierno que trabaje. No olvidar a las victimas de violación, o los familiares de los caídos, o los presos de las autodefensas que son 39.”
Santiago Navarro F. es periodista independiente, fotógrafo y colaborador con el Programa de las Américas www.americas.org/es.