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Mientras que el Plan Puebla Panamá gana apoyo financiero, la oposición pública aumenta.
Plan Puebla-Panamá: ¿Trato Hecho o Conflicto
Emergente?
by Wendy Call | 16 de abril de 2002
Incluso antes de la toma de posesión como Presidente de México en diciembre de 2000, Vicente Fox estaba ofertando un plan de desarrollo industrial masivo para los estados del sur del país y de toda Centroamérica.
Trece meses antes, la primera plana de Las Noticias, en el estado sureño mexicano de Oaxaca, anunció que Fox viajaría a Centroamérica para promover el Área de Libre Comercio de las Américas y para impulsar “una ambiciosa propuesta de desarrollo regional”. En el transcurso de una semana estuvo en la Ciudad de Guatemala, nombrando a su nueva iniciativa “Las Tres P, Plan Puebla-Panamá,” para designar el área que abarcaría, que incluye a los siete países centroamericanos, así como a los estados del sur de México, Campeche, Chiapas, Guerrero, Oaxaca, Puebla, Quintana Roo, Tabasco, Veracruz y Yucatán.
Aunque los líderes gubernamentales de Centroamérica brindaron con rapidez su apoyo al Plan Puebla-Panamá (PPP), varios residentes de la región se están volviendo cada vez más escépticos al respecto.
De acuerdo al economista salvadoreño Raúl Moreno, Presidente del Centro para la Defensa del Consumidor, en la era posterior al PPP “Centroamérica se convertirá en una super carretera, repleta con camiones de contenedores [sirviendo] a las corporaciones transnacionales. Todos nosotros estaremos a un lado de la autopista, vendiendo frutas y botanas,” afirma, imitando a los vendedores atropellados por los camiones.
En efecto, el PPP ciertamente tiene el objetivo de responder a las necesidades de tránsito del comercio global. Con el Canal de Panamá hoy en día extremadamente sobrecargado y fuera del control de los Estados Unidos, las corporaciones transnacionales están buscando nuevas rutas regionales de embarque. En los últimos años, México, Nicaragua, Honduras y El Salvador han emitido propuestas de vínculos de autopistas, ferrocarril e incluso interoceánicos acuáticos. El PPP incluye diversas conexiones entre el Atlántico y el Pacífico, así como super carreteras norte-sur que unen la región desde el centro de México hasta Panamá a lo largo de ambos litorales.
Fox reunió a un impresionante equipo de venta para su plan, comandado por Enrique Iglesias, director del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Entre otros miembros de la Comisión de Financiamiento del PPP se incluye a representantes de la Corporación Financiera Internacional (International Finance Corporation), el Banco Mundial, la Agencia para el Desarrollo Internacional de Estados Unidos, la Ayuda Danesa para el Desarrollo Internacional, y varias instituciones de la ONU.
La comisión ha hecho un progreso lento pero seguro en la promoción del PPP, a pesar de la guerra de Estados Unidos y de la recesión económica.
Apenas una semana después de los ataques del 11 de septiembre a los Estados Unidos, el Banco de Comercio Exterior (Bancomext) de México anunció una inversión por $300 millones de dólares en el área del PPP; la mitad para el desarrollo de hoteles, y la otra mitad para las industrias textil y manufacturera.
En los meses siguientes, algunos inversionistas japoneses aceptaron apoyar un gran programa de interconexión de energía en América Central, basado en combustibles fósiles y grandes diques, y el Banco de Integración Económica Centroamericana (CABEI) anunció un préstamo de $135 millones de dólares a El Salvador para la construcción de puertos y carreteras.
El presupuesto 2002 del gobierno mexicano para el PPP es de $743 millones, más del doble que la inversión federal del año pasado en el sudeste de México. Más del 80% del total de estos recursos se ha destinado al desarrollo de carreteras, puertos y otro tipo de infraestructura.
Aunque el BID y el CABEI—promotores clave del PPP— hablan sobre un “desarrollo humano y sustentable” como elementos del plan, las cifras del presupuesto dejan claro que la prioridad es la infraestructura industrial.
La información pública sobre el PPP indica que el plan tiene tres metas principales: 1) incrementar el tráfico y la infraestructura industrial de la región, mejorando la capacidad de las industrias exportadoras; 2) servir de catalizador para un cambio de la economía regional, de una agrícola a una basada en maquiladoras, y 3) ampliar el control privado sobre los vastos recursos naturales de la región.
En cierta forma, el sudeste de México tiene más en común con Centroamérica que lo que tiene con el centro y el norte del país. Oaxaca y Honduras tienen la misma tasa de analfabetismo: cerca de un cuarto de la población adulta. Yucatán tiene una tasa de mortalidad infantil mayor que El Salvador. Económicamente, la principal exportación del sur de México, como el de varios de los países centroamericanos, podría ser muy bien los miles de jóvenes que emigran cada año hacia el norte de México y los Estados Unidos en busca de trabajo.
Bajo la presión de los Estados Unidos para reducir la emigración, Fox espera que el PPP la apaciguará al atraer maquiladoras al sur y mantener así a un mayor número de migrantes en casa. Esta postura le ha acarreado críticas de ser el lacayo de los responsables de las políticas de Estados Unidos. También ha encendido la mecha por estar promoviendo el mismo modelo de privatización económica patrocinado por el largamente gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) que Fox derrotó en las elecciones presidenciales de julio de 2000.
De hecho, el PPP fue, originalmente, una propuesta desarrollada por el PRI. El ex funcionario del PRI (y actualmente autoridad en la administración Fox) Santiago Levy, presentó por vez primera la idea general del PPP un mes antes de la victoria electoral de Fox.
El esquema de Levy incluía destinar más propiedad privada al desarrollo mediante la expansión del Procede, las siglas del Programa de Certificación de Derechos Ejidales y Títulos Propiedad de Terrenos Urbanos del gobierno federal. El programa de nueve años de antigüedad, concebido por el Banco Mundial, convierte los terrenos de propiedad comunal en tierras individuales, de propiedad privadas, permitiendo que los nuevos propietarios de pequeños terrenos de subsistencia vendan, y ayudando a los grandes inversionistas a acumular grandes propiedades.
La privatización de la tierra es la clave para conseguir las metas del PPP de expansión de las manufacturas, así como el creciente control privado sobre los recursos naturales de la zona. Tan es así, que el secretario de la Reforma Agraria ha dicho que la tierra será expropiada de las comunidades indígenas y campesinas, si es necesario, para implementar el PPP.
Como el capítulo dedicado a México del primer documento público del PPP observa: “los recursos pesqueros, agrícolas y petroleros tienen importancia nacional… Algunos de los recursos de la región no están lo suficientemente explotados.”
A la larga, el éxito del PPP depende de la disposición de los indígenas mexicanos a abandonar sus hogares y sus propiedades agrícolas en el campo —y no resulta del todo evidente que estén dispuestos a hacerlo.
Los zapatistas y muchas otras organizaciones regionales de los pueblos indígenas hicieron suyo el estandarte anti PPP poco después de que el plan fue anunciado. En una manifestación en febrero del 2001 de más de 10 mil personas en la ciudad de Oaxaca, el Subcomandante Marcos del Ejército Zapatista recibió una ovación entusiasta cuando declaró: “No habrá ningún plan ni proyecto, de nadie, que no nos tome en cuenta: ningún Plan Puebla-Panamá… ni ningún otro que signifique la venta o la destrucción del hogar de los pueblos indígenas.”
Wendy Call vive y escribe en el Istmo de Tehuantepec, en el sudeste de México, como Miembro del Institute of Current World Affairs. Antes de mudarse a México hace dos años, trabajó durante 10 años para organizaciones de cambio social en Seattle y en Boston. Puede comunicarse con ella en la dirección electrónica wendycall@world.oberlin.edu
Enlaces:
“Development in Mexico” | Americas Program, October 2001 [ingles]
http://www.americaspolicy.org/reports/2001/bl82.html
“Fox Strives to Spread Maquiladoras South” | borderlines UPDATER , August 7, 2001 [ingles]
http://www.us-mex.org/borderlines/updater/2001/aug7ppp.html#fox
“Plan Puebla-Panama” | Global Exchange [ingles]
http://www.globalexchange.org/campaigns/mexico/ppp/ppp.html
“Plan Puebla-Panama” | Banco Interamericano de Desarrollo [español]
http://www.iadb.org/ppp/
“Plan Puebla-Panama” | Presidencia de la República [español]
http://ppp.presidencia.gob.mx/PPP/
“Plan Puebla-Panamá” | Red Mexicana de Acción Frente al Libre Comercio [español]
http://www.rmalc.org.mx/ppp.htm
“PPP Plays into Washington’s Hand for Latin America” | borderlines UPDATER , August 7, 2001 [ingles]
http://www.us-mex.org/borderlines/updater/2001/aug7ppp.html#ppp
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Publicado por el Programa de las Américas del Interhemispheric Resource Center (IRC). ©2002. Todos los derechos reservados.
Cita recomendada:
Wendy Call, ” Plan Puebla-Panamá: ¿Trato Hecho o Conflicto Emergente?”, Programa de las Américas (Silver City, NM: Interhemispheric Resource Center, 16 de abril de 2002).
Ubicación en Internet:
http://www.americaspolicy.org/articles/2002/sp_0204ppp .html